viernes, 10 de octubre de 2008

Peace and Love!

QUÉ PRECIOSIDAD DE LUGAR!
Nunca pensé que la isla de Ibiza ( o Eivissa) sería tan digna de ver. Se escucha demasiado el tema de las discotecas y no se promociona tanto lo que de verdad merece ser promocionado, que es el turismo de visitar las numerosas calas con las que cuenta y sus tradiciones, sus mercadillos nocturnos...
Y es que aquello parece el paraíso, agua cristalina, sol ( aunque no demasiado cuando yo fui, pero si se tiene en cuenta la época se entiende), chillout y hippies de los de verdad con sus furgonetas pintadas de colores, que van a ver la puesta del sol a la playa, extienden una manta y venden colgantes y ropas de lo más extravagante.

Como dice Pedro, he vuelto come-flores total!! jajajaja