Archivo del blog

jueves, 22 de marzo de 2012

Una aeronáutica con una duda

Hola David,

hoy he estado en la proyección y posterior coloquio contigo en la
escuela de aeronáuticos y antes que nada me gustaría darte las gracias
porque ha sido una experiencia muy interesante y considero que el
objetivo de dejar poso en nosotros está conseguido. He estado en
muchas charlas porque hasta hace poco formaba parte del grupo que las
organiza y te aseguro que este tipo de cosas no se alargan una hora en
el tiempo porque la gente así lo solicite. Eso muestra que estaban de
verdad metidos en el tema, por eso lo considero todo un éxito.
Gracias, de nuevo.

El caso es que he tenido que marcharme a las 18 porque tenía una
práctica, maldita. Cuando he salido,he bajado por si daba la
casualidad de que seguíais, y así ha sido, pero ya estabais cerrando,
y me he quedado con ganas de preguntarte algo. Más tarde te he visto
en la boca de metro de Ciudad Universitaria, ¡pero ahí me ha dado
corte acercarme!. Así que solo me queda escribirte por correo y
esperar que tengas un hueco para contestarme. Espero que no hayáis
hablado de esto en mi ausencia, por no hacerte repetir algo que ya has
contado.

Mi pregunta es la siguiente : cuando tú nos hablabas de lo que supone
para ti ser periodista nos decías que es contar la realidad,
acercándote a todos los lados del conflicto y lo comparabas con
nosotros, que hacemos lo que hacemos. Cuando has dicho eso he pensado
en que yo el día de mañana haré lo que tenga que hacer, nunca se sabe
dónde acabará una, pero es muy probable que cuando termine mi jornada
dé carpetazo y me vuelva a casa, olvidándome casi por completo del
trabajo. Tú hoy nos has hecho ser conscientes de algo de lo cual
vivíamos completamente al margen, por lo menos en mi caso. Mientras
veía el reportaje, sentía el peso de mi móvil, literalmente, en mi
bolsillo. Me daban ganas de sacarlo y estamparlo contra el suelo y
decir: " con esto no comulgo". Sin embargo cabe la posibilidad, y la
probabilidad es bastante alta, de que mañana o pasado mi mente esté
sumergida de nuevo en mi próximo examen o en otras mil preocupaciones,
más o menos trascendentes... pero, ¿ eso te puede pasar a ti, que has
pisado la misma tierra en la que más de 200 mujeres fueron violadas,
que has hablado con ellas, que las has mirado a los ojos mientras te
lo contaban? No sé si entiendes por dónde voy... me he quedado con
ganas de saber cómo una persona digiere esa realidad que como tú mismo
has dicho " supera a uno mismo y lo supera todo" y qué conclusiones
sacas de ellas... me he quedado con ganas de saber si tienes confianza
en el ser humano después de haber visto con tus propios ojos tanta
miseria, tanta lucha por intereses más o menos ocultos, tanta
avaricia...me he quedado con ganas de saber si merece la pena saber
tanto y poder hacer tan poco. Esta última pregunta cógela con pinzas
porque entre saber y no saber me decanto por el saber, pero joder,
tanto sufrimiento igual para mi sería un precio demasiado alto...

No sé si me he sabido explicar, pero tenía que escribirte porque no
quería dejarlo pasar y quedarme con esto dentro o lo que es peor,
olvidarme de ello.

Me iba a despedir con esa frase que cantaban algunos congoleños en el
reportaje... pero yo y mi memoria. No me acuerdo cual era así que sin
más, me despido dándote de nuevo las gracias por todo y deseando que
sigas haciendo lo que te gusta, que creo que es esto. No hay nada
mejor que aportar al mundo lo que uno sabe hacer y no tengo duda de
que tú aportas y mucho.


No hay comentarios: